Deadpool

Wade Winston Wilson era hijo de un general de la armada y un joven afectado por una enfermedad terminal. Después de que su madre muriera de cáncer de pulmón, su padre se convirtió en alcohólico y empezó a maltratarle. La influencia de su violento padre transformó a Wade en un delincuente juvenil. Cuándo Wade tenía 17 años su padre fue asesinado por un amigo ebrio en una pelea de bar tras lo cual Wade abandonó sus estudios para unirse a las Fuerzas Especiales del Ejército de Estados Unidos. Fue expulsado del ejército tras un corto período de tiempo y se estableció como mercenario, alcanzando pronto una formidable reputación.

Durante esta época, el bufete de abogados interdimensional Landau, Luckman & Lake había descubierto gracias a su departamento precognitivo que Wade estaba destinado a cumplir un papel importante en una futura edad dorada de la humanidad, aunque él no lo sabía. Empezaron a seguir sus pasos con su agente, Zoe Culloden, también conocido como The Expediter, mientras el director precognitivo, Montgomery, investigaba toda la vida de Wade. En sus visitas a Boston, Wade entabló una relación con la entonces prostituta Vanessa Carlyle que se convertiría en su compañera y mercenaria conocida como Copycat. Después de un tiempo, y tras echar a perder una misión para acabar con la vida de Blind Al (la ciega Al, en español),se le diagnosticó cáncer terminal. Acabó con su relación con Vanessa, obsesionado por su enfermedad. Desesperado por una cura, Wade se ofreció voluntario para el segundo proyecto Arma X, donde su cuerpo y su mente serían alterados a nivel genético. Inicialmente la manipulación genética le daría un factor curativo superhumano basado en el ADN de un antiguo experimento de Arma X (Wolverine), deteniendo el avance de su cáncer y aumentando enormemente sus habilidades físicas. Sin embargo, el cáncer interactúo con el proceso genético de manera inesperada: Quedó horriblemente desfigurado y mentalmente inestable.